Las ventajas de una lavandería en hoteles y hostales son numerosas y pueden ayudar a gestionar y satisfacer las necesidades de los clientes más exigentes.
Cuidar de los huéspedes y ofrecerles servicios de alta calidad es, sin duda, el objetivo primordial de cualquier negocio hotelero que se precie, y esto se consigue tratando de satisfacer sus necesidades.
Para ello hay que tener en cuenta muchos aspectos: la limpieza de las instalaciones y las habitaciones, la calidad de los servicios de restauración y, sobre todo, la calidad y limpieza de la ropa de cama.
Este último aspecto en particular, la limpieza de la ropa blanca, es uno de los más delicados y buscados por los clientes de hoteles y hostales, y es precisamente este aspecto el que vamos a analizar hoy, o mejor dicho, las ventajas que una lavandería puede aportar a los hoteles y hostales.
Servicios al cliente
Empecemos por un concepto que podríamos definir fácilmente como el principal: los beneficios en términos de servicios al cliente.
Integrar un servicio de lavandería en un hotel u hostal significa dar al cliente que elige su establecimiento una enorme ventaja en términos de tiempo, calidad y, sobre todo, versatilidad y ahorro.
En cuanto a tiempo y ahorro, imagínese que para cada necesidad de lavandería el cliente, o el propio hotel/hostal en su nombre, tuviera que acudir a un tercero. Como puede suponer, esto aumentaría considerablemente el tiempo de espera, ya que una lavandería externa también tendría que pensar en las necesidades de otros clientes, y los costes debido a un recargo que la misma lavandería aplicaría al coste del servicio.
Todo esto, como habrás adivinado, se soluciona instalando una lavandería interna, que ofrece tanto la ventaja del tiempo, ya que el cliente, una vez instalada la lavandería, puede dedicarse a otras cosas, como la ventaja del ahorro, al no tener que pagar por un servicio externo.
Muchos hoteles y hostales incluyen este servicio en el coste total de la estancia.
Cuando se trata de versatilidad y calidad, es fácil de entender. Las lavanderías modernas están equipadas con programas y funciones de alto rendimiento, lo que las hace extremadamente versátiles y capaces de tratar diferentes tipos de tejidos, desde el simple algodón hasta tejidos más preciados como la seda, la lana o el lino, garantizando la máxima calidad.
Y, aunque no hace falta decirlo, conviene recordar que las lavanderías también están equipadas con secadoras automáticas de igual rendimiento, garantizando a los clientes un servicio completo.
Como puede imaginar, los beneficios no se limitan al cliente.
Beneficios para el hotel
También son numerosas las ventajas para el hotel u hostal que opta por incluir un servicio de lavandería interno.
Se trata de una auténtica inversión que aporta beneficios tanto en términos de servicios ofrecidos, y por tanto de valor percibido de la propia instalación, como en términos de costes y optimización del trabajo interno.
En cuanto a los servicios ofrecidos, hemos sido muy claros en el párrafo anterior, pero en cuanto a los costes y la optimización del trabajo, seamos claros desde el principio.
Tener la opción de lavar tu propia ropa in situ es, sin duda, una gran ventaja, porque aunque los costes de los servicios aumenten por el uso de máquinas, siempre serán menores, y por mucho, que los que un hotel u hostal tendría que asumir acudiendo a terceros.
Por no hablar del mantenimiento, que será prácticamente inexistente si se recurre a empresas especializadas capaces de prestar este servicio, ya que toda la asistencia necesaria se suele suministrar con la máquina.
La optimización del flujo de trabajo es quizá una de las ventajas más importantes de una lavandería de hotel.
Piense en el tiempo que puede ahorrar el personal si sólo tiene que preocuparse de cargar y descargar la ropa una vez hecha. La automatización total, unida a la altísima eficiencia que garantizan estas lavanderías, hace que el personal del hotel pueda optimizar al máximo cada tarea, ya que no necesita estar físicamente presente para revisar la lavandería.
Además, el hecho de que la lavandería se encuentre dentro del establecimiento es una ventaja añadida, tanto en términos de control directo de la ropa como en términos de tiempo, que sería mucho mayor si tuvieran que esperar a la recogida y entrega por parte de una lavandería externa.
No se puede negar que optar por invertir en una lavandería en un hotel u hostal es una elección realmente inteligente y, sobre todo, rentable, como ha podido comprobar por muchas razones.